Estamos a tiempo, cada decisión cuenta. Pico y cédula, auxilios alimentarios con la cancelación de la feria, entrega de alimentos para adultos mayores y beneficiarios del PAE. Pero también acatar el aislamiento preventivo obligatorio.
Hemos decido entregar los auxilios alimentarios con todas las medidas necesarias para evitar la propagación del COVID-19 y eso incluye no hacer las entregas que generen aglomeraciones, sino enviarlas desde el punto de acopio, con todas las medidas de asepsia, hasta sus hogares. Hoy comienzan a llegar los primeros mercados a sus casas.
A nuestros adultos mayores se les garantizará la ayuda alimentaria a través de los centros vida.
A los florideños que me han preguntado ¿cuándo nos veremos? ¿Qué cuándo me verán en el barrio repartiendo los 20.000 mercados? Debo decirles que no veo la hora de estrechar sus manos y que pare esta tempestad. Continuemos quedándonos en casa.
Por eso, debo ser responsable con la situación que acontece y como primera autoridad de nuestra ciudad dar ejemplo PORQUE DE ESTA SALIMOS JUNTOS.
De mi parte he asumido mi responsabilidad como ciudadano y acatado todas las medidas decretadas por el gobierno nacional.
Como recordarán el pasado 20 de marzo, a solicitud del gobernador, los cuatro alcaldes del Área Metropolitana tuvimos que hacernos la prueba del COVID-19, pues el Alcalde de Bucaramanga Juan Carlos Cárdenas había estado en contacto con el Alcalde de Popayán que había dado positivo. Los alcaldes del Área Metropolitana, habíamos sostenido reuniones con el gobernador Mauricio Aguilar y con el Alcalde de Bucaramanga.
Así como lo vieron, el gobernador y el alcalde de Bucaramanga dijeron en sus redes sociales que sus pruebas habían sido negativas, y que seguían trabajando por la ciudadanía. Igualmente seguimos trabajando todos en el Área Metropolitana, habiéndonos informado que las demás pruebas no habían sido procesadas por el Instituto Nacional de Salud, según esa entidad, porque no habíamos tenido contactos con el alcalde de Popayán, y nuestro colega de Bucaramanga y el gobernador habían dado negativo.
No obstante, he acatado todos los protocolos de aislamiento, actuando con prudencia, dándolo todo por Floridablanca, no teniendo contacto más allá de mi entorno familiar, desarrollando mi labor y cumpliendo mis funciones por medios tecnológicos, en acatamiento a las medidas de aislamiento preventivo.
El primero de abril, recibí llamado de la Secretaría de Salud Departamental manifestándome que debía practicarme una prueba, porque había llegado un reporte a mi nombre y al parecer la prueba si había sido procesada.
Producto de la duda, el 1 de abril procedieron a practicarme una prueba de COVID-19. Sin embargo, quiero contarles las inconsistencias del caso:
- Las pruebas que nos practicaron inicialmente fueron recopiladas el 20 de marzo.
Pero ante el resultado negativo para COVID 19 del gobernador y del alcalde de Bucaramanga, se descartaron las demás y no las procesaron en el Instituto Nacional de Salud porque no éramos contactos de ningún positivo.
- El 1 de abril, es decir, 12 días después, me informaron que es necesario hacerme una prueba.
- Según me informaron, la prueba fue procesada solo el 31 de marzo, es decir 11 días después de haber sido tomada y llegó al Instituto Nacional de Salud tan solo hasta el 27 de marzo, 7 días después de haber sido tomada la prueba, teniendo presente que según los expertos solo puede durar 72 horas para ser procesada.
- Es conveniente precisar que no he tenido ninguno de los síntomas y ha estado en óptimas condiciones de salud.
Respetuoso de los protocolos, estoy a la espera del resultado de la prueba, para comunicarle a la opinión pública una vez el Instituto Nacional de Salud aclare la duda. Sin embargo, el día de ayer supe que fuentes internas de las instituciones que manejan la información, la han tergiversado.
Hoy estoy dando a conocer esta situación y las inconsistencias del caso, sin conocer aún el resultado de la prueba, esperando que este relato no afecte su resultado.
Finalmente, quiero reiterarles que sigo acá, evitando tener contacto físico y trabajando de manera virtual, en pie de fuerza, por ustedes, por mi pueblo florideño, porque no podemos permitir que el COVID-19 haga colapsar nuestro sistema de salud. Pido al Sistema de Salud, responsabilidad en el manejo y custodia de las pruebas que se están tomando y procesando.
Miguel Moreno Suárez
Alcalde de Floridablanca
Con el fin de reducir la presencia de habitantes en las calles de Floridablanca, el alcalde, Miguel Moreno, adoptó una nueva medida de ‘Pico y Cédula’ desde este lunes 6 de abril en todo el municipio, con el fin de reducir el riesgo de infección con Coronavirus (COVID-19).
La medida tomada en conjunto con sus homólogos de Girón y Piedecuesta, amplia la autorización de salida a los ciudadanos no sólo para abastecerse de alimentos, bebidas y drogas, sino también todas aquellas que requieren hacer diligencias ante bancos, cajeros automáticos y el desplazamiento para el reclamo de subsidios del Gobierno Nacional (Colombia Mayor, Familias en Acción y Jóvenes en Acción).
“Queremos evitar la propagación de la enfermedad en el área metropolitana, por eso estamos trabajando articuladamente”, explicó el alcalde de Floridablanca, Miguel Moreno.